9 de enero de 2014

Carta de los trabajadores depedidos de Perfil

Carta de los 13 trabajadores despedidos de Perfil, leída en la asamblea de hoy al resto de sus compañeros, ya que Fontevecchia no les permite pasar los molinetes.

Compañeros,
Muchos nos conocen a varios de nosotros, trabajamos juntos en un mismo piso, nos cruzamos en los pasillos, nos miramos a los ojos en otras asambleas, en otros conflictos, pero también lo hicimos en celebraciones de fin de año, en cumpleaños de amigos en común, nos abrazamos, nos dimos un beso, o simplemente hicimos una nota juntos o charlamos buscando información en el archivo.
Ustedes nos conocen y saben que no somos delincuentes como la empresa nos quiere hacer creer. Ustedes lo saben porque son trabajadores igual que nosotros y conocen tanto las miserias como las satisfacciones que vivimos todos los días en esta profesión y en esta empresa. Hubo tiempos de encuentros y de desencuentros, hubo tiempos de festejos, pero también hay un tiempo que no es una sonrisa la que nos vuelve a unir. Y ese tiempo vivimos hoy, desde hace tiempo ya. Desde que cerraron el diario Libre en adelante, nos une una pelea por un trabajo con derechos, un trabajo tranquilo, donde nadie sienta miedo de levantar la mano en una asamblea, de expresarse en defensa de un compañero, de ser el próximo en recibir un telegrama de despido.
En esa estábamos el viernes 20 de diciembre en la planta de Barracas, acompañando a otros compañeros que nunca antes cruzamos pero que pronto vamos a cruzar, cuando la editorial termine de mudarse. En esa estábamos también cuando intentamos defender a los 7 compañeros que previamente habían sido enviados al fondo editorial, un área que es un limbo laboral. Siete compañeros de los cuales uno era miembro de la junta electoral, y por lo tanto tenía inmunidad legal. En esa estábamos cuando luchamos contra los despidos de nuestros compañeros fotógrafos, porque según la empresa ya no sirven más. No sirven más porque para eso está internet o estamos nosotros, los redactores, y algunas camaritas poquet.
Hoy nos toca a nosotros, hoy somos 13, cinco de los cuales también están en la junta electoral. Otra ilegalidad. Pero los delincuentes, insiste la empresa, somos nosotros.
Mañana será el turno de otros 10 fotógrafos. Y antes de la mudanza se vienen otros 50 o 60 más de nosotros, los mismos que nos miramos a los ojos en estos pasillos todavía. Y después? En qué condiciones vamos a trabajar? Con quiénes? Quiénes se van a sentar en nuestros lugares? Cómo vamos a encarar las paritarias?
Este es un mensaje de los 13 despedidos de hoy, somos sus compañeros, y no queremos irnos de nuestros puestos de trabajo. Estamos peleando por ser reincorporados y para eso los necesitamos. Desde el lugar que puedan, pero los necesitamos.
Hoy el paro es fundamental porque estamos a la espera de una conciliación obligatoria para poder ser reincorporados. Pero también hay otras formas de apoyarnos entre todos.
Queremos seguir trabajando, pero también queremos trabajar en paz.
Lamentamos no poder decirles esto mirándonos a los ojos, porque la empresa no nos permite entrar ni para ir al baño. El lugar para vernos es la asamblea que hacemos a diario en el hall.
Los convocamos también este viernes al acto que haremos en la puerta del diario, a las 13. Para eso también es necesario convocar a toda la gente que podamos. Amigos, colegas, personalidades de la cultura, políticos, referentes de derechos humanos, etc. Su presencia o adhesión es muy importante. Y de paso nos encontramos y nos volvemos a mirar a los ojos.
Muchas gracias.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario